¿Quién ganará las parlamentarias?


Asistí el lunes pasado a un evento de “Transparencia Venezuela” en el hotel Pestana de Santa Eduvigis, Caracas, donde se analizaron las perspectivas tanto del Gobierno como de la oposición en las elecciones parlamentarias a celebrarse en diciembre. Un panel de primera, conformado por Asdrúbal Oliveros, Colette Capriles, Alonso Moleiro y Tulio Hernández, nos da una visión diáfana sobre las estrategias que implementan los  asesores de estos sectores políticos en la búsqueda de votos o fidelidades para alcanzar la victoria el 6 de diciembre. A continuación procuro sintetizar el mensaje de cada expositor:

Asdrubal Oliveros. Este excelente economista, directivo de la firma Eco-analítica, nos presenta en números un conjunto de indicadores del comportamiento de la economía del país, resultados de los malos manejos del actual Gobierno en aspectos cruciales para la estabilidad del país, tales como endeudamiento, divisas, reservas internacionales, importaciones, tipos de cambio, activos, efectivo, vencimiento de deuda, venta de petróleo, producción y sus efectos sobre la reducción de asistencia a los países del Caribe, etcétera.
Este conjunto de elementos permiten conocer las posibilidades pocas o nulas de que dispone el oficialismo para hacer uso de estrategias económicas efectistas -tipo Dakazo- que busquen revertir las tendencias electorales que apuntan a una contundente derrota del gobierno. Nos comenta los subterfugios utilizados por el régimen para obtener fondos con miras a los vencimientos de deuda del próximo año 2016. Las contradicciones que -con desparpajo- asumen al mantener un anclaje cambiario de Bs. 6,30 para el gasto corriente y un  ponderado de Bs. 240,  para bienes y productos de primera necesidad. La resistencia del gobierno a asumir el costo político de una devaluación y de un aumento de la gasolina. Las posibilidades de que Venezuela incurra en un default el próximo año  apremiada por  la situación crítica del desabastecimiento y las necesidades de incrementar las importaciones.



Colette Capriles. Esta perspicaz socióloga se adentra en el submundo de las maquinaciones político electorales que estilan poner en práctica los gobiernos totalitarios para recuperar popularidad y reducir o revertir el apoyo popular a las corrientes y líderes de la oposición, a lo que el gobierno de Maduro es un fiel practicante.
Hace especial referencia a la utilización de la hegemonía comunicacional del gobierno  venezolano para estigmatizar a los líderes opositores con supuestas relaciones con crímenes montruosos, procurando la repugnancia hacia ese sector por parte de los receptores de esa falaz información. También Colette examina la conducta de los grupos votantes no definidos y las debilidades de la oposición en la conquista de este sector. Insinúa las acciones del oficialismo dirigidas a rescatar sus chavistas descarriados, como es tratar de revivir los sentimientos que sembró Chávez; acentuar la polarización que siempre les dio resultados; tarea de difícil éxito ahora. Nos convence de las amenazas de la abstención que siempre ha hecho tanto daño a la oposición y a la que juega el Gobierno estimulándola constantemente con sus explícitos abusos de poder.

Alonso Moleiro. Este agudo periodista nos da una visión bien argumentada de la clara ventaja que tiene la oposición sobre el oficialismo en las elecciones parlamentarias. Se pasea por los diferentes episodios electorales pasados; los errores cometidos por la oposición y los éxitos alcanzados por la MUD, no difundidos con suficiencia por no contar con el apoyo de los medios. Nos demuestra el quiebre definitivo del proyecto chavista y de la esfumada conexión del pueblo con los líderes de este gobierno. Es un convencido de la imposibilidad del Gobierno de revertir la tendencia desfavorable de su popularidad en todos los estratos sociales.
Da cuenta de la utilización por el régimen de las OLP como único instrumento efectista para parecer interesado en la solución del problema de la delincuencia, pero lo considera insuficiente para alcanzar electoralmente algún resultado de repunte.

Tulio Hernández. Este denso sociólogo y analista político nos recrea sobre las conductas  sociales y políticas que incidieron en el florecimiento del chavismo y el caudillismo que ese supuesto mesías representó. Con mucho tino ahonda sobre los comportamientos del venezolano que contribuyen a mantener creencias  equivocadas por parte de las masas, fundamentalmente las de escasa formación. Insiste en la necesidad de crear confianza en torno a la MUD.

Creo que todos hicieron excelentes análisis, recomendaciones y conclusiones que merecieron el aplauso del público. Durante el cofee break aprovecho de conversar con Tulio Hernández. Le pregunto:


 -Tulio, esas visiones que ustedes nos muestran, algunas más optimistas que otras, supongo que dejan un margen para lo inesperado o lo desesperado en que pueda incurrir el gobierno para impedirnos la victoria.

-Claro hermano. Tú sabes que hay un conjunto de variables a tener en cuenta -sin apasionamientos- para aproximarse en un análisis a las probabilidades del resultado. Nosotros tenemos una visión más o menos coincidente sobre los probables o deseables resultados, que van a depender siempre de una serie de realizaciones o conductas por parte de la Mesa de la Unidad, pero también de la sociedad civil, de los partidos políticos y de la gente en general que está obstinada de este Gobierno.

- Entiendo que hay aspectos sobre los que no se tiene el control y que pueden influir en el margen de diferencia que pueda sacársele al Gobierno.

- Por supuesto, y son temas de peso en la contienda electoral. Existen muchos votantes que no están de acuerdo con este régimen, pero tampoco les gusta la opción de la MUD. A esas personas hay que convencerlas de la necesidad del voto a favor del cambio. Algunos son habituales disidentes, gente siempre reacia a participar; bueno allí hay que hacer un trabajo de campo.

-Bueno igual ocurre con los chavistas desencantados. Los que dicen que son chavistas, pero no maduristas. Esa gente difícilmente va a votar por la oposición. Qué crees tú?

-Por supuesto. Pero el Gobierno sigue una estrategia de motivación con esos sectores, conoce sus debilidades y va a intentar persuadirles a punta de billete, reforzando la atención de las necesidades de esos grupos. Hay mucho trabajo que hacer para contrarrestar la vileza del régimen.

-Terminó el descanso Tulio, pasemos….!



Comentarios