¿Y después del 20, qué?








Oliver conversa con su compadre después de ver en los titulares de la prensa internacional la sentencia que en rueda de prensa emitió el escritor Mario Vargas Llosa en la ciudad de Bogotá, en la que concluye proféticamente que Venezuela va camino a su desintegración.

-Compadre yo creo que no es necesario escuchar de la boca de un premio Nobel  tal aserto, para concientizarnos de la suerte que nos  aguarda si continua el gobierno en manos de estos facinerosos. Ya Venezuela está desintegrada moralmente, socialmente, institucionalmente, militarmente y sicológicamente. No se si el pronóstico del Nobel se refiere a una desintegración  territorial o geográfica producto de  escisiones que pudiera propiciar en las fuerzas militares regionales del país la continuación de este nefasto gobierno chavista.

-Oliver, es que acaso podemos esperar el 20 algún resultado que nos haga modificar la perversa dinámica de vida  que padecemos bajo este oprobioso régimen.

-Desde luego que no va haber ninguna sorpresa en esos resultados. Ese fraude a la población está mas que planificado por el gobierno con la asesoría de los chulos cubanos que no pueden darse el lujo de perder la teta petrolera venezolana.

-Y entonces compadre, qué vamos hacer?

-Mira Gustavo, como lo escribí recientemente, yo soy un duro para mantenerme viviendo en esta ignominia por mi apego al Ávila, a Caracas y a mis otras querencias en Venezuela, pero en nombre del fervor patrio tampoco podemos inmolarnos como los músicos del Titanic. Creo que ya es hora de saltar de este barco infestado de ratas y lanzarnos a la mar a riesgo de ser devorados por los tiburones.

-Si brother, yo también creo que es hora de salir corriendo de este infierno. Pero dime una cosa, lo que te regresó a escribir sobre el país, fue ese discurso de Vargas Llosa o  fue el hecho de que tu otra hija también abandona la próxima semana el país.

-Todos esos factores tienen su peso en la decisión, pero lo que más me alarmó fue lo que le  ocurrió a un pana del tenis que se le enfermó el papá y tuvo que dejar en depósito en la clínica casi 400 millones de bolívares para ser admitido y le estaban cobrando los honorarios médicos en dólares para poder realizarle la intervención quirúrgica. La cobertura de las pólizas HCM es actualmente muy precaria. La otra opción en estos casos es irse a un hospital del gobierno a ver morir al familiar de mengua y abandono, que es lo que impera en esos antros venezolanos de la salud.

-Que grave pana, de verdad que estamos como condenados a muerte en nuestro país.

-No solo eso brother, esta semana el precio del cartón de huevos llegó a un millón trescientos mil bolívares y el kilo de carne a un millón seiscientos. Te puedes imaginar la cantidad de gente que va a morir por desnutrición en los próximos meses. Esos bonos que Maduro les ofrece a sus ingenuos seguidores carnetizados de patriotas no les alcanzan para comprar nada. Eso es una burla. Qué se creerá ese imbécil?

-Bueno y con las elecciones del 20 de mayo el tipo se va a quedar seis años más.

-Lo peor es que quienes acudan a votar serán parte de esta gran obra bufa de teatro que se llama “democracia venezolana”. Cómo pueden  haber elecciones que nada van a solucionar la grave crisis que vivimos generada por los cínicos que nos gobiernan y aspiran continuar con el genocidio y estimulando la diáspora. Lamentablemente muchos venezolanos se prestarán para esta opereta.


-¿Viste el ultimo llamado de la Conferencia Episcopal?

-Claro compa, los argumentos de la Conferencia Episcopal son irrebatibles. Los curas son hoy los venezolanos que están mas claros políticamente. Esa es otra razón para no esperar mas salidas propuestas por la MUD.

¿Entonces compadre, vamos a misa o hacemos maletas?

¡Las dos cosa compaladre!


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