Amor sexual. /Poema
El poema que tienes ante ti se adentra en una reflexión profunda sobre el amor que, en su versión más física y efímera, ha sido mitificado por generaciones en canciones, novelas y discursos cotidianos. Aquí se expone una visión que rompe con el ideal romántico, ese que nos empuja a elevar el amor sexual a una categoría casi mítica, cuando, en realidad, su esencia es transitoria, superficial y marcada por la fugacidad.
A través de una mirada crítica, el poeta desnuda las verdades incómodas del amor sensorial, ese que solo toca la piel y juega con el corazón como si fuese un teatro emocional. Nos invita a reconocer la diferencia entre el amor pasional y otras formas de afecto más profundas y duraderas, como el amor filial o fraternal, enraizados en la sinceridad y la permanencia.
Este poema no pretende restar valor a las emociones pasajeras, sino más bien ofrecer una invitación a reflexionar sobre por qué glorificamos lo temporal, mientras lo verdaderamente duradero permanece en silencio. Aquí, se nos recuerda que, a pesar de todo, al final de ese viaje emocional, lo que queda es lo fraternal, lo honesto y lo espiritual.
Amor sexual.
A veces me pregunto:
Por qué tanta canción y novela dedican al amor efímero y sensorial, ese que juramos a otro (a) como eterno e inmortal, como sublime y total.
Pero no es de verdad así, solo está en la piel, es mero superficial, lo del corazón es teatro emocional.
Es un placentero tormento, si, costoso y temporal
Que nos obstinamos en pregonar,
Que los hombres juramos perdurar
A ellas encanta ante otras fantasear
Que es "el amor de mi vida", o a ellos lucubrar,
es "la mujer perfecta", es todo sensacional.
En fin, la novela ideal.
Pero no sale del alma
como el amor filial, el que se profesa a los hijos o el maternal,
Es solo un rico aguaje que transcurre horizontal
que termina sin aviso y sin pensar.
Que cuando se va, lamentan los que aún tienen por dar
Los del entorno piensan que era de esperar
Subsiste entonces el cariño fraternal,
sí aquella sucesión de emociones fue firme y cordial,
Sí los trazos fueron sinceros y
la tolerancia reciproca y espiritual,
Si no hubo engaños que pudieron lastimar
Si hubo trances que dolieron por igual,
Por qué entonces tanto canto a episodios que todos sabemos el final.
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