Oda a mi madre

 

Prólogo

La vida está hecha de recuerdos que llevamos como huellas profundas en el alma. Algunas de esas huellas, sin embargo, son tan grandes, tan poderosas, que parecen imposibles de borrar. En cada rincón de la memoria, en cada aroma, en cada lugar que visitamos, habita una presencia inquebrantable, aunque ya no esté físicamente con nosotros. Así es el recuerdo de una madre: eterno, inmortal, una compañía constante.

En esta oda, Olinto evoca a su madre desde la nostalgia y el amor profundo. Es un homenaje a esos momentos compartidos en playas soleadas, en centros comerciales, en la cotidianidad de la vida familiar. Son imágenes que no solo hablan de una persona, sino de un vínculo irrompible, de una vida vivida con amor y dedicación. Este poema no es solo un canto al pasado, es una reafirmación de que el cariño trasciende el tiempo y la distancia, y de que, en el corazón, las madres son inmortales.

Olinto comparte aquí una parte de su alma, una despedida que, al final, no lo es del todo, porque el amor de una madre nunca se va, permanece en el eco de las canciones, en los sabores, en los recuerdos que, aunque dolidos, se vuelven dulces con el paso del tiempo.

Oda a mi madre

A  meses de tu partida, cómo te extraño mi vieja

Yo te creía inmortal

Yo te quería infinita

como el cielo o como el mar.

Cómo te puedo olvidar

si las playas que adorabas

me preguntan dónde estás

les miento, que estás comprando

una prenda en el Sambil,

pero en el de Porlamar,

o en Conejero una chicha, la bola' e queso

 holandes o un  Toblerone del grande

que nos gusta por igual,

o tomando un trago en Remo

restaurant de Porlamar

donde solíamos almorzar

cuando arribamos a la isla

donde te gustaba pasar

vacaciones en familia

con tus hijos y Olimar

Oh mami, oh mami mami blue oh mami blu

e

(Canción Mami blue/ Pop Tops)

Me dejaste la cartera de marca

que no pudiste estrenar

la última que compraste

en  Sambil de Porlamar.

Cómo olvidar esos ratos 

bonitos en paz con todos,

en playa El Agua o Parguito,

el Hilton o Laguna Mar

Una vida de querencias que no se puede borrar 

Familia es familia y cariño es cariño, dice  Rubén Blades en su tema magistral "Amor y control"

Oh mami, oh mami mami blue oh mami blue