Algo más que un whisky (parte II)

 




-¡Asesoría laboral. Buenas tardes! – contestó Laura.

 

-¡Hola Laurita!, es el doctor Villasmil. ¿Cómo están todos por allá?

 

-¡Hooola doctor! Bueno usted sabe, como siempre, gente nueva y problemas viejos- sentenció la añeja secretaria del área.

-Ja ja ja! - rió Víctor.

- ¿Y a usted cómo le va? - inquirió Laura.

-¡Bien, bien! Laura disculpa, me puedes pasar a la doctora Majares.

-Ah, no doctor, ella está de reposo,  llámela al celular, ¿lo sabe?

-¿Está enferma? - preguntó Víctor, como quien hace un cumplido.

-Ja, ja, bueno sí, digamos que sí. ¡Está disfrutando de su permiso pre y post natal! 

 

El Dr. Villasmil quedó perplejo al escuchar del otro lado de la bocina la noticia del embarazo de Mila, quien parecía haberse esfumado hacia meses, extrañamente no lo había llamado más, y ese silencio le sugería que algo pasaba.

 

(Este relato no lo podrás continuar leyendo, ya que ha sido incorporado a un libro del autor que está en proceso. Se denominará "Colección de navajas")


 



Comentarios